
En 1956, con 21 años tuvo que incorporarse al servicio militar, siendo destinado al arsenal de la base naval de Cartagena, donde pasó dieciocho meses aunque nunca se enroló en un barco.
Una de sus anécdotas durante este período fue participar en el rescate de un buque cuyo incendio duró tres días. El dato curioso fue que era un barco de caramelos.


No hay comentarios:
Publicar un comentario